viernes, junio 20, 2008

Poder Chilango
Pasarse los altos, meterse en sentido contrario, cruzar el arroyo vehicular lejos de las líneas peatonales, salir a comer el viernes y no regresar al trabajo, orinar el edificio del PRI, abuchear a los teloneros piteros cuando vamos a un toquín, y así sigue... Son tales síntomas de un chilanguismo del que no me espanto y en el que muchos lectores seguramente me reconocen y dijeron ya "¡pinche Ginzu!"
Bueno, recién observé y tuve el gusto de ser partícipe de una de las manifestaciones del chilanguismo más dignas de loa y que debieran ser imitadas por las generaciones actuales y las que están por venir.
Caminaba por el andén del metro para transbordar de la linea 5 a la 2, es decir, estaba en Tacuba. Superé el amotinamiento que los vendedores clandestinos de esas fantásticas dos bolsas de papas por 5 pesos ocasionan, seguí caminando por el extremo del andén que casi nadie usa por ser innecesario dar la vuelta hasta allá cuando el pasillo inmediato te lleva al mismo lugar, pero esta ocasión además de mayor comodidad tuvo el beneficio de permitirme participar en la corretiza de unos maleantes.
Sucedió así: Ya en el último tramo del tunel antes de llegar al andén de la linea 2, y cerca de la salida que da al inmenso y confuso tianguis de pornografía y comida, pasaron junto a mi dos fulanos corriendo; un tercero que venía de atrás conminó a quienes caminábamos a que los persiguiéramos: "Esos asaltaron/robaron (no recuerdo o no entendí bien) a una chava, ¡vamos a agarrar a los cabrones!"; con esas buenas reacciones que luego no le salen a uno, varios nos dispusimos en una fracción de segundo, alguien dijo "Ya vas" y comenzó la carrera.
Me gustaría decirles que atrapé al de chamarra café estrellándolo contra la pared del andén y tirándole tres dientes, y que al otro ojete de chamarra azul no lo prendí pero lo tiré a las vías del tren que llegaba a la estación, pero no fue así, mi participación se vió limitada a asediar a esos ojetes y alertar al resto de la ciudadanía, no sé bien cómo fue que los aprehendieron, cuando yo y quienes corrían junto a mi llegamos los tiras ya los habían frenado, justo antes de que abordaran el tren; los catearon y pusieron contra la pared, algo alegaban, pero todos los señalaban. "¿Dónde está la chava?" preguntaron los tiras "¡allá atrás se quedó!" dijo una señora, en segundos la agraviada apareció, el tira preguntó si eran esos, ella entre lágrimas asintió.
Creo que todos querían aplaudir como al final de las películas de Harry Potter (nunca he visto una, pero entiendo que eso sucede) pero en vez de eso alguien dijo "pinches rateros", y "sí, andan de picudos" alguien más añadió. El animal ese de chamarra azul algo alegó y quería voltear, uno de los tiras le dijo "voltéate cabrón" y le pegó en la cabeza con una chingadera que nunca había visto que trajeran, se asemejaba a un látigo con pequeñas pesas en los extremos... Se los llevaron y fue todo.
Salí de la estación sin hacer el transborde, pues seguramente el metro tardaría en avanzar por el incidente y mi destino no estaba lejos.
Todo lo que podía pensar es cuán nefasto es el hecho de que quienes más queremos estén expuestos a encontrarse con sabandijas como esas, cazandoles cuando les parezca que se encuentran vulnerables... Ojalá haya más manifestaciones de este nuevo tipo de poder chilango, como el otro día que un maricón tiró basura en reforma y fue increpado por el resto de los peatones... "¡pinche emo!" le gritaron cuando en vez de recojer la basura se regresó a pisarla el naco maricón...
La aprehensión de los ladrones, la censura contra el que contamina en la calle, el no dejar que siga floreciendo la cultura de esos sabandijas debería ser la nueva consigna del Poder Chilango...
Y si no les parece me vale madre...

6 comentarios:

Pecatus dijo...

No mames Llin ¡qué pro! Ja ja ja ja ja, recordé cuando en una ocasión mi amigo el "Rambo", el "Aquaman" y un servidor, le pusimos una madriza a un ratero-microbusero que fallidamente intento robar nuestros relojes de pulso marca Casio, ja ja ja ja ja.

Lo que más me sorprende de esta historia es que hayas podido correr (O_o)! Lo qué la adrenalina hace caray... Pero chido, que bueno que cazaron a esas pinches ratas y que mal el hecho de corroborar tu postura burocrática aun en los eventos emergentes de esa naturaleza: Mira que en lugar de romper madres y padres te limitaste a "alerta, guiar y asediar", ja ja ja ja.

Cómo sea, estuvo chido y lo mejor, es que te imaginé corriendo con la lengua de fuera y toda desgreñada, ja ja ja ja ja ja.

Sale pues, bien día.

Anónimo dijo...

YO VOTO POR EL LINCHAMIENTO
Por: mi
La escuela piagetiana podrá tener muchos defectos pero uno de sus grandes aciertos es que cualquier laceración súbita deja imborrables recuerdos en el conciente e inconciente del sujeto de prueba por lo tanto yo optaría por ponerle una muy buena madriza a aque que…

1. Obstruya las rampas para personas con necesidades diferentes
2. Atropelle a cualquier animal de cuatro patas
3. Atropelle motociclistas
4. Fomente y/o sea participe de la corrupción
5. Robe con cualquier tipo de violencia a ancianos, mujeres y niños
6. Destruya vidas al conducir bajo los efectos de alguna sustancia tóxica
7. El que haga desmadres vehiculares y luego se de a la fuga
8. Atropelle motociclistas
9. Tire a la vía pública desechos (sin importar tamaño o toxicidad)
10. Maneje como estúpid@
11. Atropelle a motociclistas
12. Atropelle a ciclistas
13. Atropelle a deportistas callejeros
14. Se comporte como mal funcionario público o burócrata de quinta
15. A los burócratas que le chupan la lana al país
16. Atropelle motociclistas
17. Le vaya al América, sea Emo o tendencias Priistas.
18. Atropelle motociclistas

PARA QUE VIVAMOS MEJOR

Anónimo dijo...

Me queda claro con el comentario anterior que no debo de atropellar motociclistas...
A wevo Ginzu!!! creo que se te quedo aquello de las clases de civismo, (que debería de retomar, el estres me mata)Chilango Ruuuuleeees!!!

Námaste Heptákis dijo...

Yo no comparto los ánimos chilangos a pesar de ser defeño, o quizá por eso.
Discrepo de ellos porque parece que se está planteando como mejor que nosotros corrijamos a los infractores, a que se fomente la legalidad.
Lo justo, me parece, está más cercano del camino civilizado que fomenta el respeto y el cumplimiento de las leyes, pues en eso se fundamenta nuestra naciente democracia, que del otro camino, ya que en el segundo se disuelve la tenue diferencia entre la venganza y la justicia, a más de, cuando torna institucional, parir leyes absurdas como aquellas innovaciones del progresismo de izquierda del gobierno del Distrito Federal.

Y respecto al comentario de anonymous, lo más curioso es que ese recurso renovable que es el peatón no corre el riesgo de ser atropellado.

Unknown dijo...

Viva el poder chilango!!!!

Chopperstardust dijo...

toques en los huevos, a ver si así se educan.